Por enésima vez, la próxima semana volverá a haber en el Congreso un debate sobre el sistema aeroportuario español. En esta ocasión, a iniciativa de ERC y bajo la fórmula de una Interpelación Urgente al Gobierno.
Por enésima vez escucharemos al Ministro de turno –Blanco en esta ocasión- hablar de un supuesto nuevo modelo aeroportuario español.
Por enésima vez, cuando de la interpelación se derive para la próxima semana la moción consecuente, y tengamos que fijar todos los grupos políticos nuestras respectivas posiciones, ocurrirá, con toda probabilidad, lo siguiente:
-que tanto el PSOE (y, por supuesto, los diputados PSE de turno) como el PP (y los diputados de Euskadi de esa formación) –para que hablar de UPyD- votarán en contra de toda descentralización real de dicha gestión.
-y que los nacionalistas vascos y catalanes votaremos, si es el caso, a favor de una descentralización a fondo de dicha gestión.
Esto es lo que n-1 veces –la de la próxima semana- ha ocurrido hasta ahora. Y tengo alguna curiosidad por ver si, tras los movimientos dados por Fomento en este campo, todo sigue igual o empiezan a moverse algunas piezas.
A lo largo de mi vida, he podido escuchar expresiones diversas sobre lo que es (sería) el Estado en su “core”. En cierta ocasión, le escuche a un Ministro francés decir que el Estado era el “amenagement du térritoire”.Vamos, que el Estado es “la ordenación del territorio”. He leído, en diversas ocasiones, decir que el Estado son/serían “las fuerzas armadas”, “la fiscalidad”,… y no sé si alguna otra cosa, pero no me extrañaría que alguien hubiera dicho, en alguna ocasión, al menos en España, que el Estado es “Fomento”.
Que lo piensan, y, todavía más, que actúan como tal no tengo duda alguna. Y aclaro: cuando aquí hablo de Estado, hablo, claro, de Estado, o quizás mejor, de Gobierno central-centralista. Y si alguien tiene alguna duda le recomiendo muy sinceramente el libro, de reciente aparición, ESPAÑA, CAPITAL PARIS, de Germà Bel. El subtítulo del libro es suficientemente explícito de la tesis del autor: “Origen y apoteosis del Estado radial: del Madrid sede cortesana a la “capital total”.
En esto, al igual que a la hora de ponerse de acuerdo para echar al nacionalismo del PNV del Gobierno, no hay PP ni hay PSOE. Son la misma cosa. Sin solución de continuidad entre gobiernos de uno u otro signo han configurado, entre ambos, sistemas viarios, ferroviarios y aeroportuarios prácticamente sin otro horizonte que el de hacer un Estado “radial” al servicio de un Madrid “cortesano”. Y para que nada escapara de ese objetivo, ante el hecho inapelable de no disponer de puerto marítimo en el centro de la piel de toro, han organizado el sistema portuario de forma que tampoco se escapara, salvo apariencias, de ese mismo esquema centralista. No queda lejos en el tiempo, como muestra más reciente de ello, la última modificación de la Ley de puertos.
Vuelvo al tema aeroportuario. El artículo 10.32 del Estatuto de Gernika dice: La Comunidad Autónoma del País Vasco tiene competencia exclusiva en ferrocarriles, transportes terrestres, marítimos, fluviales y por cable, puertos, helipuertos, aeropuertos y Servicio Meteorológico del País Vasco, sin perjuicio de los dispuesto en el artículo 149.1.20º de la Constitución. Cedntros de contratación y terminales de carga en materia de transportes. Y el artículo 12-8 dice: Corresponde a la Comunidad Autónoma del País Vasco la ejecución de la legislación del Estado en puertos y aeropuertos con calificación de interés general, cuando el Estado no se reserve su gestión directa.
Todo esto dice el Estatuto de Autonomía de Gernika. Los catalanes tienen sus propias disposiciones al respecto, principalmente en su recién modificado Estatuto.
Es evidente que ningún Ministro/a de Fomento, del PSOE como del PP, ha pensado siquiera un minuto, en estos o parecidos textos estatutarios a la hora de definir y llevar a efecto los sistemas bien fueran portuarios, ferroviarios o aeroportuarios del Estado. En toda la historia pasada. Y lo propio, de seguro, sigue ocurriendo ahora que nos anuncian, y perfilan, un nuevo sistema aeroportuario.
Esa es la norma, mande quien mande. Sin excepciones, de igual que manden socialistas y/o populares de Andalucia, Castilla La Mancha o Euskadi, Cataluña o Galicia. Muy lamentable pero totalmente previsible.
Lo triste, ahora mismo, en Euskadi, es que el Gobierno Vasco se ha sumado también a esta esquema de actuación y a esta previsibilidad. ¿Ha oído alguien al Consejero Arriola, al Viceconsejero Gasco o a quien corresponda –para qué hablar del Lehendakari Lopez- definir siquiera –no ya defender- cual es el modelo de gestión ferroviaria o aeroportuaria que quieren y defienden para el País Vasco, según corresponde a éste de acuerdo con el Estatuto de Autonomía de Gernika?
Pues si siempre era y es necesario que lo haga quien pretende gobernar en Euskadi, ahora mismo, vistos los movimientos, siquiera retóricos, que hay en Madrid, por ejemplo en el tema aeroportuario, es, además, absolutamente oportuno y urgente que se defina. Quedo a la espera por si podemos, desde el grupo parlamentario del PNV, apoyar o ser apoyados en esta reclamación.